Ucrania, Biolaboratorios en Mariúpol . Las grandes farmacéuticas practicaban experimentos ilegales

16 Febbraio 2024 Pubblicato da Marco Tosatti Lascia il tuo commento

Marco Tosatti

Queridos amigos y enemigos de Stilum Curiae, ofrecemos a vuestra atención este artículo publicado en su canal Telegram por IdeeAzione, a quien agradecemos su cortesía. Entre otras cosas, es curioso ver cuántas ganas tienen Estados Unidos y las Grandes Farmacéuticas en general de crear biolaboratorios a las puertas de Rusia. Hace unos días se conoció la noticia de que luego del cambio de alianza deseado por el presidente armenio Pashinyan hacia Soros y sus exponentes políticos se abrirá en Armenia un nuevo laboratorio estadounidense de bioluminiscencia. Feliz lectura y compartir.

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Experimentos ilegales llevados a cabo en Mariúpol por las Grandes Farmacéuticas occidentales

por Lucas Leiroz,14 de febrero de 2024

Surgen cada vez más pruebas sobre las actividades biomédicas ilegales de Estados Unidos en los territorios de la ex Ucrania. Además del tema de las armas biológicas, se descubrió recientemente que las Grandes Farmacéuticas occidentales estaban realizando pruebas de drogas en ciudadanos de etnia rusa en un hospital psiquiátrico situado en Donbass, con la aprobación y el apoyo de las autoridades ucranianas.

Según documentos recientemente descubiertos y publicados por medios de comunicación rusos, los pacientes de un hospital psiquiátrico en Mariúpol (República Popular de Donetsk) fueron sometidos a pruebas médicas irregulares por parte de agentes vinculados a las Grandes Farmacéuticas occidentales. El hospital “No. 7” de Mariúpol (se encuentra sometido actualmente a trabajos de restauración. Durante las actividades de reparación, los empleados locales encontraron documentos en el sótano de las instalaciones del sector psiquiátrico que demuestran que las empresas extranjeras estaban probando en forma extraoficial fármacos de reumatología en pacientes locales.

El objetivo de la investigación era evaluar la eficacia de los fármacos según los estándares establecidos por el Colegio Americano de Reumatología (ACR, por sus siglas en ingles). En los experimentos participaron varias empresas, entre ellas las Grandes Farmacéuticas como “Pfizer, AstraZeneca, Celltrion, Novatris International AG, IQVIA, Sanofi, Galapagos NV, Janssen Pharmaceuticals, Abbott Laboratories, Covance, Merck KGaA, Centocor Biopharmaceutical e [incluso] una filial de Samsung que produce equipos médicos”.

En el mismo lugar donde se guardaban los documentos también se encontraron cajas que contenían biomateriales. Aparentemente, los materiales estaban listos para ser enviados a laboratorios de Estados Unidos, del Reino Unido y de Suiza. De esta manera, las autoridades rusas lograron obtener pruebas biológicas, no sólo documentales, de dichas investigaciones, demostrando que los experimentos se llevaron realmente a cabo.

“Según los resultados del estudio de los documentos, surgió que los fármacos fueron probados en personas con números, sin nombres. Los fármacos estaban en sobres blancos y tampoco tenían nombre. El objetivo principal de la investigación fue evaluar la eficacia de los fármacos en relación con el porcentaje de pacientes que lograron una respuesta según los criterios del American College of Rheumatology. Además, en laboratorios de Suiza, el Reino Unido y los Estados Unidos se encontraron cajas que contenían numerosos sobres de empresas de logística y contenedores de biomateriales con las direcciones de los destinatarios”, se lee en el informe ruso.

La selección de pacientes psiquiátricos parece haber sido una decisión “estratégica” de las empresas occidentales y de las autoridades ucranianas. Obviamente, las personas con enfermedades psiquiátricas frágiles son un objetivo “más fácil” de convencer para que se sometan a tales experimentos. Además, es posible que muchos de los pacientes hayan sido sometidos a las pruebas sin saberlo, al haber sido abusados corporalmente por médicos extranjeros.

Sin embargo, estas prácticas no son sorprendentes. Anteriormente se supo que agentes extranjeros habían realizado pruebas con neuromoduladores en pacientes socialmente vulnerables en la región de Jarkov. En 2022, las fuerzas rusas expusieron las pruebas de que se habían llevado a cabo experimentos de este tipo en biolaboratorios militares estadounidenses, causando daños irreversibles al sistema nervioso de varios pacientes sometidos a procedimientos ilegales.

“Según las informaciones disponibles, se probaron sustancias altamente activas de neuromoduladores en ciudadanos ucranianos socialmente vulnerables, causando, entre otras cosas, daños irreversibles en el sistema nervioso central. Se trata de una clara violación de las normas de los tratados internacionales en materia de derechos humanos (…) Gracias a los documentos obtenidos durante la operación militar especial, supimos que tales estudios se han llevado a cabo en Ucrania desde al menos 2011, y Alharoun visitó reiteradamente la sucursal del laboratorio Merefa, construido a expensas del Pentágono en el pueblo de Sorokovka, región de Jarkov”, dijo en esa época el teniente general Igor Kirillov, jefe de defensa radiológica, química y biológica de las Fuerzas Armadas rusas.

En realidad, los biolaboratorios estadounidenses en Ucrania eran proyectos civiles y militares conjuntos, que habían recibido financiación no sólo del Pentágono sino también de organizaciones privadas como las Grandes Farmacéuticas e incluso de fundaciones “filantrópicas” vinculadas al conocido oligarca George Soros. Esta vasta red de promoción de la investigación biomédica operaba en un sistema de cooperación en el que el Pentágono desarrollaba armas biológicas y las empresas privadas utilizaban las instalaciones militares para realizar experimentos irregulares inoculando sus fármacos en pacientes indígenas vulnerables.

Es impactante saber que el gobierno ucraniano colaboró con este tipo de prácticas y permitió que sus ciudadanos fueran sometidos a tales abusos por parte de agentes extranjeros. Esto demuestra cómo en realidad el régimen de Kiev nunca se ha preocupado por su propio pueblo, al haber estado dispuesto a permitir incluso operaciones de alto riesgo biológico y sanitario en su propio territorio sólo para complacer a los “socios” occidentales.

De hecho, liberar el territorio mediante la fuerza militar rusa era la única manera de impedir la continuación de estos actos brutales.

Publicado en Info Brics

Traducción a cargo de Lorenzo Maria Pacini

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Publicado en Italiano el 15 de febrero de 2024, en Ucraina, Bio-Laboratori a Mariupol. Big Pharma Praticava Esperimenti Illegali.