Korazym.org: una Iglesia irrelevante, con fuerte tendencia a la desaparición

7 Ottobre 2021 Pubblicato da

 

Marco Tosatti

 

Estimados amigos y enemigos de Stilum Curiae, me parece que es interesante presentar para vuestra atención este artículo aparecido en  Korazym.org, sitio web que ustedes conocen bien y aprecian. Feliz lectura.

§§§

Si incluso alguien como el cardenal Kasper lo califica de “no católico”, podemos imaginar cómo será el documento final que surgió del Camino Sinodal alemán, próximo a su publicación. simplemente “Sobrepasado el límite de la decencia, no hay más retorno”, escribimos el 25 de septiembre de 2021 [AQUÍ].

Parece que la progenie conciliar está a punto de engullirse a sí misma y que el papa Francisco está simplemente acelerando el proceso, lo que también podría ser un favor concedido. Después, serán pocos, muy pocos los que se salvarán, pero serán los justos y de allí se avanzará: “Nada se pierde. Mantenerse firmes en la fe es la decisión correcta. Pero cuánto más difícil de perseguir. Muchos no lo entenderán. Pocos serán los justos que se salvarán. Porque habrán pagado en persona. Porque su sacrificio se hizo necesario” [Pochi i giusti, che si salveranno – 21 settembre 2021].

Compartimos a continuación un artículo publicado el 29 de septiembre de 2021 por el sitio web argentino Caminante Wanderer, traducido al italiano por Valentina Lazzari, e informado en su blog Duc in Altum [AQUÍ] por Aldo Maria Valli, quien observa y pregunta: “El fracaso de Bergoglio certifica el fracaso de la ‘Iglesia Nueva’ que surgió del Concilio. Sin embargo, seguimos por el mismo camino. ¿Y después de Francesco?”.

 

La Iglesia irrelevante

Caminante Wanderer, 29 de setiembre de 2021

 

En las próximas semanas se publicará el documento final surgido del sínodo alemán y que se presume catastrófico. El obispo de Ratisbona lo ha calificado de herético y nada menos que el cardenal Kasper de “no católico”. Este acontecimiento, que nosotros por ahora vemos de lejos, es indicativo de la situación real en la que se encuentra la Iglesia católica en la actualidad: la irrelevancia, con una fuerte tendencia a su desaparición. En un estudio reciente llevado a cabo en Alemania se concluye que sólo al 12% de la población, incluidos los católicos, les parece que la religión tiene alguna importancia en la sociedad. Es decir, al 88% les da lo mismo que la Iglesia exista o no exista, y si siguen saltando los escándalos de los últimos años, no sería raro que prefieran directamente que no exista. Seguramente los porcentajes serán distintos en Europa del sur, en Estados Unidos y en Iberoamérica, la fantasiosa reserva de la Iglesia, pero ¿cuánto más? ¿20%? ¿25? Sí, en el mejor de los casos.

Estos datos los he tomado de un video del P. Santiago Martín que recomiendo vivamente. Y este sacerdote, que no es un tradicionalista, concluye: “La nueva Iglesia ha fracasado”. Y es que, si después del Concilio Vaticano II la Iglesia, que ya estaba en retirada, adoptó la estrategia de adaptarse al mundo para permanecer en el candelero y no perder fieles, esa estrategia se ha revelado como un error espantoso que nos ha encaminado a la presente situación de extinción.

El fracaso de la “Nueva Iglesia” | Actualidad Comentada | 24-9-2021 | Pbro. Santiago Martín, FM | Magnificat TV, proyecto evangelizador de los Franciscanos de María

 

Y no es necesario recurrir a estudios sociológicos o a costosas encuestas realizadas por consultoras internacionales. Basta visitar los domingos —no digamos los días de semana—, las iglesias: están vacías. Y lo mismo en Europa que en Argentina. La poca gente que aún iba antes de la pandemia, ya dejó de hacerlo por efecto del pésimo manejo que hicieron los obispos de las cuarentenas decretadas por los gobiernos. Un lector comentaba en la entrada anterior del blog: “En la parroquia donde yo concurro, ayer domingo en misa sólo éramos siete más dos del coro, el cura casi se puso a llorar. Y motivos no le faltan porque cualquier secta de esas que proliferan por ahí reúne mucha más gente”. Y esta no es una situación privativa de Argentina. Es la situación que se observa en todo el mundo.

Pero el problema se agrava porque la jerarquía de la Iglesia, comenzando por el Sumo Pontífice, no reconoce la gravedad terminal de la enfermedad y propone incrementar las dosis del mismo remedio que ya probó su efecto nocivo. Recuerdo, solo para poner un ejemplo entre tantos, lo dicho a los jesuitas eslovacos: “Por eso hoy se vuelve al pasado: para buscar seguridad. Nos asusta celebrar delante del pueblo de Dios que nos mira a la cara y nos dice la verdad. Nos asusta seguir adelante con las experiencias pastorales. Pienso en el trabajo realizado en el Sínodo de la familia para hacer entender que las parejas en segunda unión ya no están condenadas al infierno. Nos asusta acompañar a gente con diversidad sexual. Tenemos miedo de las encrucijadas de las que nos hablaba Pablo VI. Este es el mal de este momento”.

Bergoglio insiste con que el adulterio ya no es pecado y en el “acompañamiento” a las personas con diversidad sexual como signos de esta “nueva Iglesia” “en salida” que ha probado ser un completo fracaso. Muy pocos son los adúlteros interesados en ir a misa o en comulgar, y menos aún los diversos sexuales. Ambos saben bien qué tienen que hacer para ser salvos: más vale arrancarse un ojo y entrar tuerto en el Reino de los Cielos, que irse con los dos ojos al infierno.

La catástrofe actual de la Iglesia no es culpa de Francisco. Lo hemos repetido aquí infinidad de veces; son problemas que se arrastraban desde hacía décadas y que se resolvieron mal sistemáticamente. Pero sí es su responsabilidad la hecatombe que se prevé en un futuro próximo. Hace un par de días, un medio laico calificó a Bergoglio como “el Papa más ridículo de la historia de la Iglesia” y como “tonto”, y ya dimos cuenta aquí que aún sus amigos más cercanos lo han dejado solo. El rey está desnudo y ya no sólo el niño se ha dado cuenta.

Considero que es tarea urgente y grave responsabilidad de los obispos, encargados por Nuestro Señor del gobierno de la Iglesia, sentarse a pensar seriamente qué hacer para encontrar una salida que tenga un mínimo de garantía de éxito. El pontificado de Bergoglio está ya terminado y fracasado. No se puede insistir por esa vía. El problema es lo vendrá después de él. Ya ha quedado claro que la crisis de la Iglesia no se arregla refosilándose con el mundo y juntando multitudes en las JMJ o en los viajes pontificios. Esas fueron ingenuas esperanzas de los ’80 y ’90 que han quedado sepultadas.

El P. Martín, al final de su video, explica que en su opinión la solución exige la unidad. Y estoy de acuerdo. El problema es que cómo se logra.

 

La tempestad se calmó – “Ese mismo día, al anochecer, les dijo: ‘Vámonos a la otra orilla’. Y dejando a la multitud, se lo llevaron, tal como estaba, en la barca. También había otras barcas con él. Mientras tanto, se levantó una gran tempestad de viento y arrojó olas al interior de la barca, tanto que se llenó. Él estaba en la popa, sobre una almohada, y dormía. Entonces le despertaron y le dijeron: Maestro, ¿no ´te importa que perezcamos?’. Despertándose, regañó al viento y le dijo al mar: ‘¡Cállate, cálmate!’. El viento cesó y hubo una gran calma. Luego les dijo: ‘¿Por qué tienen tanto miedo? ¿Aún no tienen fe?’. Ellos se llenaron de gran temor y se decían unos a otros: ‘¿Quién es éste, a quien el viento y el mar también le obedecen?” (Mc 4, 25-41).

 

Apostilla

Según el padre Martín, la solución requiere unidad. Está bien. El problema es cómo se obtiene la unidad. En la Iglesia, el único factor de unidad lo impuso el mismo Jesús: la fe. No hay otra forma: la unidad se refiere a la Fe. Ahora bien, si seguimos pensando que cada generación debe preguntarse qué es la fe, estamos en el suelo.

Luego, el padre Martín dice que “todas las religiones verdaderas tienen prohibiciones (entre muchas otras cosas). Es un problema de ciencia, no de filosofía ni de opinión”. Esta afirmación es en gran parte una tontería increíble. No hay “religiones verdaderas” en plural. Por definición, una religión es la verdadera, la única, o no lo es y, en consecuencia, es falsa. La verdadera religión solo puede ser una. Por lo tanto, no existen “religiones verdaderas”.

Y que tengan o no prohibiciones no es un signo característico de ser una religión, sino quizás de no serlo. La Religión Católica, que es la verdadera, no tiene “prohibiciones” en el sentido de los caprichos de sus autoridades circunstanciales: como verdadera religión, depende de la Sabiduría Divina, en el interior de la cual está la Moral. Por eso se dice que “la moral no es creada”, porque al existir en la Sabiduría de Dios, es eterna como Él. En consecuencia, hay cosas que se deben hacer y otras que se deben evitar para permanecer -los bautizados, no solo cualquiera- en la participación de la vida trinitaria en este mundo, y para alcanzar su plenitud en el mundo venidero.

Si Bergoglio – o quien sea por él – quiere modificar la Moral, no viola las prohibiciones, sino que se burla de la Sabiduría Divina y corre locamente hacia su perdición, ya que nadie puede burlarse de Dios.

Comenzar por no contradecir estas simples verdades es comenzar a caminar por el camino de la unidad en la Fe. Algo que por el momento -y en esto podemos coincidir con Caminante Wanderer– es necesario ver cómo se puede lograr la unidad, porque el instrumento por excelencia para lograr ese objetivo, que es el Papado, está profundamente desbandado. Como una nave en medio de una tormenta, con el Señor que nos pregunta: “¿Por qué tienen tanto miedo? ¿Aún no tienen Fe?” (Cf. Mc 4, 40).

 

Publicado originalmente en italiano el 6 de octubre de 2021, en https://www.marcotosatti.com/2021/10/06/korazym-org-una-chiesa-irrilevante-con-forte-tendenza-alla-scomparsa/

Traducción al español por: José Arturo Quarracino

§§§




SE PENSATE CHE

 STILUM CURIAE SIA UTILE

SE PENSATE CHE

SENZA STILUM CURIAE 

L’INFORMAZIONE NON SAREBBE LA STESSA

 AIUTATE STILUM CURIAE!

*

Chi desidera sostenere il lavoro di libera informazione, e di libera discussione e confronto costituito da Stilum Curiae, può farlo con una donazione su questo conto, intestato al sottoscritto:

IBAN:  IT24J0200805205000400690898

*

Oppure su PayPal, marco tosatti

*

La causale può essere: Donazione Stilum Curiae




Ecco il collegamento per il libro in italiano.

And here is the link to the book in English.

Y este es el enlace al libro en español


STILUM CURIAE HA UN CANALE SU TELEGRAM

 @marcotosatti

(su TELEGRAM c’è anche un gruppo Stilum Curiae…)

E ANCHE SU VK.COM

stilumcuriae

SU FACEBOOK

cercate

seguite

Marco Tosatti




SE PENSATE CHE

 STILUM CURIAE SIA UTILE

SE PENSATE CHE

SENZA STILUM CURIAE 

L’INFORMAZIONE NON SAREBBE LA STESSA

 AIUTATE STILUM CURIAE!

*

Chi desidera sostenere il lavoro di libera informazione, e di libera discussione e confronto costituito da Stilum Curiae, può farlo con una donazione su questo conto, intestato al sottoscritto:

IBAN:  IT24J0200805205000400690898

*

Oppure su PayPal, marco tosatti

*

La causale può essere: Donazione Stilum Curiae




Questo blog è il seguito naturale di San Pietro e Dintorni, presente su “La Stampa” fino a quando non fu troppo molesto.  Per chi fosse interessato al lavoro già svolto, ecco il link a San Pietro e Dintorni.

Se volete ricevere i nuovi articoli del blog, scrivete la vostra mail nella finestra a fianco.

L’articolo vi ha interessato? Condividetelo, se volete, sui social network, usando gli strumenti qui sotto

Condividi i miei articoli:

Libri Marco Tosatti

Tag: ,

Categoria:

I commenti sono chiusi.